De:
Gregor Schimidinger (2019)
con:
Simon Frühwirth, Paul Forman y Josef Hader.
Porque es hipnótica y diferente.
Porque sorprende.
Porque se queda grabada en la memoria.
Porque es un viaje a las emociones.
Por el guión, que atrapa y remueve.
Por cómo habla de la ansiedad, el despertar sexual, las nuevas tecnologías o la soledad.
Por la potencia de sus imágenes.
Por el buen hacer de Gregor Schimidinger como director.
Porque cuida la estética pero también las interpretaciones.
Porque Simon Frühwirth está brillante.
Por todo lo que cuenta con la mirada.
Porque Jakob me ha robado el corazón.
Por esa impactante y genial marca de nacimiento.
Por descubrir a Paul Forman.
Por ese tramo final fascinante.
Porque sus imágenes son pura poesía y psicodelia.
Por la excelente dirección de fotografía.
Por como juega con colores, tonos y texturas para diferenciar lo cotidiano, lo experimental y lo imaginado.
Por la cosmología.
Por perderse en un museo para reencontrarse a uno mismo.
Por las primeras veces.
Por el sexo pixelado.
Por sentirse vivo.
Por experimentar.
Por el caos interior.
Por mirar al miedo de frente.
Por todo eso y más.