De:
Pedro Almodóvar (2011)
con:
Antonio Banderas
Elena Anaya
Marisa paredes
Jan Cornet
Roberto Álamo
Porque Almodóvar es mucho Almodóvar.
Porque es una pena que sus películas que no son obras maestras se consideren malas, cuando siempre valen la pena.
Porque me habría gustado mucho más terror para una historia tan brutal como la que cuenta.
Porque debería horrorizar, y en ocasiones provoca risa.
Porque tiene un estilo propio e inconfundible.
Porque tiene cosas muy buenas.
Porque los primeros 20 minutos son una auténtica obra de arte.
Porque me sorprendieron y me tuvieron enganchadísimo.
Porque ese guión tan retorcido y lleno de giros.
Por esa estética fascinante, impecable, potente.
Porque visualmente es una delicia.
Porque tiene planos y encuadres increíbles.
Por la fotografía del maestro Alcaine.
Porque Elena Anaya es maravillosa.
Porque es capaz de todo.
Porque atrapa con una simple mirada a cámara.
Por su imagen ampliada en la tele de plasma.
Por la grandísima Bárbara Lennie y lo que consigue con dos secuencias de nada.
Por Jan Cornet dándolo todo y más.
Porque sus caras de terror absoluto ponen los pelos de punta.
Por una divertidísima Blanca Suárez.
Porque me ha ganado por completo con ese momentazo de auténtico drama en el armario.
Porque Marisa Paredes siempre brilla.
Por volver a ver a Antonio Banderas protagonizando una peli española.
Por lo desaprovechado que está el gran Roberto Álamo.
Porque no debe ser fácil interpretar a un tipo duro embutido en un ridículo disfraz de tigre.
Porque me alegra verlo en pantalla grande.
Porque Alberto Iglesias firma otra partitura brillante.
Porque siempre es un placer escuchar a Concha Buika.
Porque soy fan absoluto del trabajo de Louise Bourgeois desde que vi una exposición suya en el CAC de Málaga.
Por el yoga como terapia de choque.
Por esa impresionante pared llena de textos y dibujos.
Por los avances de la ciencia.
Porque es muy fácil saltarse la línea de la moralmente correcto.
Porque con la bioética podría haber abierto un debate muy interesante y sin embargo pasa muy por encima.
Por los siempre impagables cameos de Esther García y Agustín Almodóvar.
Porque su secuencia en la tienda con la ropa de la mujer es el único momento de verdadera comedia en toda la película.
Porque el título de la película es brillante.
Por ese final que no sé si es una obra de arte o una tomadura de pelo.
Porque la imagen de Vera, segura y fuerte, caminando por ese camino de tierra habría sido un final maravilloso.
Por todo eso y más.
La cinematk de Joe Marlango 
No se, yo estoy en desacuerdo, de los 20 min son los mejores para mi es lo peor del film,.. la primera parte de la pelicula me aburrio muchisimo, en cambio la segunda parte es donde mas me gusto del film,…
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